Precalienta el horno a 400°F (200°C) y cubre una bandeja para hornear con papel pergamino.

Mezcla la harina, el azúcar, el polvo de hornear, la sal y el bicarbonato en un tazón mediano. Ralla la mantequilla congelada en la mezcla y trabájala con los dedos hasta que se forme un grano grueso, luego añade las pasas.

Bate la crema agria y el huevo en un tazón pequeño hasta que se combinen.

Incorpora la mezcla de crema agria a la mezcla de harina usando un tenedor. Trabaja la mezcla en una bola de masa con las manos.

Coloca la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y aplasta formando un círculo de 7-8 pulgadas, de aproximadamente ¾ de pulgada de grosor. Espolvorea con azúcar.

Corta en 8 triángulos con un cuchillo afilado y colócalos en la bandeja de hornear separados por 1 pulgada.

Hornea los scones durante 15-17 minutos hasta que estén dorados. Enfría durante 5 minutos.