Disuelva la levadura en agua tibia en un tazón grande. Deje reposar hasta que esté cremosa, aproximadamente 10 minutos.

Mezcle el azúcar, la sal, la mantequilla derretida, el huevo y la harina integral en la mezcla de levadura. Incorpore gradualmente la harina para todos los usos hasta que la masa se despegue del tazón. Amase sobre una superficie enharinada durante unos 8 minutos hasta que esté suave y elástica. Coloque en un tazón ligeramente engrasado, cubra y deje levar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño, aproximadamente 1 hora.

Golpee la masa hacia abajo. Cubra y deje que suba nuevamente en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño, aproximadamente 30 minutos.

Engrase 24 moldes para muffins. Divida la masa en dos porciones. Extienda cada una en un rectángulo de 6x14 pulgadas, córtela en doce tiras de 7x1 pulgadas, enróllelas en espiral y colóquelas en los moldes para muffins. Pinte con mantequilla derretida y deje que suba sin tapar durante 40 minutos o hasta que duplique su tamaño.